El Cordyceps sinensis es uno de los remedios naturales más populares de la medicina tradicional asiática que únicamente se consume por sus beneficios para la salud.
Popularmente se conoce como ‘insecto de invierno, hierba de verano’, nombre que tiene que ver con su desarrollo y fructificación. En este caso hablamos de un hongo parasitario con un ciclo vital muy curioso:
- En verano, sus esporas caen sobre las orugas de las polillas que habitan los pastos de las altas mesetas del Himalaya, a más de 3 800 metros de altura. Durante el invierno, las larvas de las orugas se entierran en el suelo para hibernar mientras que el micelio de este hongo parásito invade su cuerpo.
- Con la llegada de la primavera, este micelio comienza a fructificar con una forma alargada y cilíndrica que se abre paso entre los pastos para recibir la luz del sol.
Este complejo proceso, también limitado por el lugar en el que se lleva a cabo, hace que sea un bien muy escaso y caro. Sin embargo, en las últimas décadas, se ha optimizado un proceso de cultivo sobre sustratos naturales ricos en proteínas que ha dado lugar a producciones de Cordyceps con características prácticamente idénticas a las del hongo que crece de forma natural.
Principales componentes activos
- Cordicepina
- Ácido glutámico
- Aminoácidos
- Poliaminas
- D-manitol
- Esteroles
- Ácidos cordicéptico
- Nucleósidos
- Vitaminas del grupo B (B1, B2 y B12) E y K
- Minerales (sodio, potasio, calcio, magnesio, hierro, cobre, manganeso, zinc, selenio, etc.)
Beneficios del Cordyceps avalados por la ciencia moderna
El aumento de la energía asociada a este hongo se debe al incremento del ATP celular. Del mismo modo, el aumento de la disponibilidad de oxígeno se ha postulado como la principal acción ejercida por este hongo para contrarrestar los efectos del mal de altura:
- Mejora la función respiratoria
- Antidepresiva
- Afrodisíaca y vigorizante
- Mejora la fertilidad
- Equilibra el sistema inmunitario
- Antiviral
- Protege los riñones
- Cardiotónica
- Hepatoprotect
El cultivo de Cordyceps
El cultivo de C. sinensis se lleva a cabo en laboratorio con la auténtica cepa Cs4 que, una vez aislada, permite obtener el extracto a partir del micelio del hongo.